Las aventuras de Tintín: el secreto del Unicornio (The Adventures of Tintin, 2011), de Steven Spielberg, es el principal tema de portada del núm. 317 de Imágenes de Actualidad, seguido de Contagio (Contagion, 2011), de otro Steven, Steven Soderbergh. A propósito de esta última, y siguiendo una brillante sugerencia del colega Tonio L. Alarcón, he centrado el Cult Movie en una famosa “película de virus”, La amenaza de Andrómeda (The Andromeda Strain, 1971), de Robert Wise, basada en una novela de Michael Crichton, de la cual ha podido verse hace poco por TVE su aburrido remake televisivo en formato miniserie a cargo de Mikael Salomon (2008): “Uno de los aspectos más notables de esta película –el cual, en no pocas ocasiones, ha sido utilizado para criticarla severamente– reside en su a mi entender deliberada frialdad narrativa. A falta de conocer por mí mismo la novela de Crichton en la que se inspira, especulo con la posibilidad de que dicha frialdad de exposición ya se encuentre previamente en el libro del firmante de «El hombre terminal», «Esfera», «Congo», «Sol naciente», «Acoso» o la propia «Parque Jurásico», quien era muy amigo de combinar elementos de alta tecnología con tramas de aventuras y de intrigas conspiratorias, de lo cual solían resultar unas novelas que conjugaban hábilmente los datos científicos con la caracterización de unos personajes, por lo general, «expertos» en la materia de la cual se trataba”.
También firmo, entre otros artículos, un pequeño comentario crítico de La piel que habito (2011), de Pedro Almodóvar, que me parece lo más interesante que haya realizado hasta la fecha este cineasta con el cual, como bien saben quienes me conocen, jamás he simpatizado salvo en esta ocasión, y ello se debe a que, “a pesar de que en “La piel que habito” aflora a ratos ese tonillo “arty” de sus últimos trabajos, el cineasta manchego se la ha jugado aquí a fondo (y a riesgo del rechazo de los amantes de esa vena “artística”) con un relato que es un puro delirio, casi digno de un melodrama “charro”, pero que el realizador mira con una extraña pero bien equilibrada mezcla de respeto a ciertas convenciones del “thriller” y el cine de terror y unas notables dosis de sarcasmo, de lo cual resulta un inclasificable pero a la vez atractivo producto, que atraviesa una y otra vez la delgada línea que separa lo sublime de lo ridículo”.
También firmo, entre otros artículos, un pequeño comentario crítico de La piel que habito (2011), de Pedro Almodóvar, que me parece lo más interesante que haya realizado hasta la fecha este cineasta con el cual, como bien saben quienes me conocen, jamás he simpatizado salvo en esta ocasión, y ello se debe a que, “a pesar de que en “La piel que habito” aflora a ratos ese tonillo “arty” de sus últimos trabajos, el cineasta manchego se la ha jugado aquí a fondo (y a riesgo del rechazo de los amantes de esa vena “artística”) con un relato que es un puro delirio, casi digno de un melodrama “charro”, pero que el realizador mira con una extraña pero bien equilibrada mezcla de respeto a ciertas convenciones del “thriller” y el cine de terror y unas notables dosis de sarcasmo, de lo cual resulta un inclasificable pero a la vez atractivo producto, que atraviesa una y otra vez la delgada línea que separa lo sublime de lo ridículo”.
Hola Tomás!
ResponderEliminarEn lo de Almodóvar no dejas de sorprender. Aunque la verdad, creo que esta es la película suya que menos a gustado a sus incodicionales, lo cual (supongo) la hace más atractiva a los que no lo son.
Sobre las adptaciones de Crichton comparto la descripción sobre sus novelas, aunque no creo que sea algo malo. No hay nada peor para el prestigio de un escritor que ser superventas. Los libros "Acoso" y "Estado de miedo" me gustaron y las películas "El primer gran asalto al tren" , "Congo" (esa mona parlante!), "Parque Jurásico" y "La amenaza de andrómeda" me parecen, como poco, sólido cine comercial. Sólo "Esfera" me parece un poco regulera.
Salú!
Como ya comenté en una entrada anterior, esta peli ha supuesto una sorpresa para mí. Almodóvar no me gusta, pero 'La piel que habito' me ha complacido moderadamente pese a la inclusión de varios elementos histriónicos típicos del manchego que me parecen muy dudosos y que evitan que el film pueda llegar a ser grande (no voy a numerarlos ahora porque todos sabemos cuáles son).
ResponderEliminarCreo que Almodóvar trata a sus películas como si fueran vasijas a las que poco a poco va agrietando a base de golpes de estilo, y cuyo propótivo final es que no se rompan pese a los imnumerables impactos salidos de tono. En esta película tengo la sensación de que finalmente no consigue romper la vasija, al contrario de lo que pasa con las otras que he visto de él. Para mí, esta forma de encarar sus películas resulta contraproducente para conseguir una obra maestra, y es una lástima porque creo que en esta ocasión tenía material para hacerlo.
Creo que para los que no somos "almodovarianos" es muy difícil que algún día un film suyo tenga un impacto catártico, ese impacto que tienen las grandes películas. Saludos.
llevo desde el 89 comprando la revista,y solo queria decirle a los criticos de la misma,que hay que ser neutrales con los gustos o preferencias los insultos o palabras mal sonantes se las pueden guardar,y no se si pixar les paga para que digan sin averse estrenado la pelicula que es una obra maestra.señores tambien hay buen cine que no sea pixar.un saludo
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